10 consejos para perfeccionar tu pronunciación en inglés

Pronunciar bien es una parte muy importante de aprender cualquier idioma. Cómo suena cuando hablas puede impactar mucho en si la gente entiende o no lo que estás diciendo y su primera impresión de ti. La parte complicada de la pronunciación es que no es solo de aprender, es una habilidad física que necesitas practicar mucho.

Y no hay atajos para pronunciar perfectamente, pero sí hay algunas formas para que practiques y mejores tus habilidades más rápido. Sigue nuestros 10 consejos y empieza a mejorar tu pronunciación hoy mismo para que te acerques más a tu meta de una pronunciación perfecta en inglés y complementes al 100% tu curso de inglés en línea.

Escúchate

Muchas veces es difícil detectar errores en tu pronunciación porque estás muy concentrado en comunicarte y no te estás fijando en el sonido que haces. Si no puedes detectar tus problemas de pronunciación, es difícil corregirlos. Intenta grabarte mientras hablas con tu teléfono o con tu computadora y toma notas de las áreas en las que podrías mejorar.

¡Lento pero seguro!

Muchos estudiantes de inglés piensan que hablar fluido significa hablar rápido. Esto no es así. Hablar muy rápido puede reforzar malos hábitos y hace que la persona que habla suene nerviosa e indecisa. Hablar lento va a darte el tiempo para respirar bien y pensar en lo que quieres decir, porque te da tiempo de pensar mientras hablas, te vas a sentir más relajado y vas a poder concentrarte para hacer que tu inglés suene mejor.

Imagínatelo…

Cierra los ojos y piensa en cómo hacer el sonido antes de decirlo. Visualiza la posición de tu boca y tu ara. Si estudiaste alguna tabla de fonética, piensa en el sonido que vas a hacer y cómo se relaciona con otros fonemas en inglés. Si en cambio usas diagramas de la boca y la lengua, piensa en la forma que tienes que hacer en tu boca para hacer el sonido correcto.

¡A entrenar!

La pronunciación es una habilidad física. Le tienes que enseñar a tu boca nuevas formas de moverse y utilizar nuevos músculos. Concéntrate en sonidos difíciles cada día. ¿Te cuesta trabajo la “th”? Pon tu lengua entre tus dientes (sin morderla) y sopla un poquito. Siente el aire pasar arriba de tu lengua.

Ve cómo lo haces

Párate frente a un espejo y ve cómo pones tu lengua, labios y forma de tu boca cuando haces ciertos sonidos. Compara eso con lo que ves en videos de nativos diciendo las mismas cosas.

Cópiate de los expertos

No hay mejor manera que aprender a pronunciar de los que de verdad saben, los nativos. Así que, ¡escucha! Escucha programas de radio en inglés y ve la tele y películas en inglés. Intenta imitar lo que escuchas, también si todavía no estás seguro de lo que se está diciendo.

Practica hasta cuando estés solo

Los problemas de pronunciación persisten por el miedo a equivocarte. Imagínate situaciones, conociendo a alguien por primera vez, pidiendo comida en un restaurante, preguntando una dirección, etc. y luego actúa el diálogo tú solo. Que no te dé pena.

Búscate un amigo para practicar

Conseguir la opinión de un tercero es muy importante. Busca un amigo que también esté interesado en mejorar su inglés. Trata de intercambiar mensajes grabados para que puedan escuchar su pronunciación.

Pon atención a la entonación y al acento

Una buena pronunciación va más allá de poder decir bien sonidos individuales. También se trata de entender la entonación (las subidas y bajadas de la voz) y el acento (algunos sonidos en palabras y algunas palabras en oraciones son más fuertes que otras). Lee poemas, discursos y canciones en voz alta, concentrándote en la entonación y el acento de las palabras.

¡Canta una canción!

Apréndete la letra de canciones en inglés y trata de cantarlas. Cantar ayuda a relajarte y a que hables, así como también ayuda con tu ritmo y entonación. Como no necesitas concentrarte para construir oraciones, ¡puedes concentrarte en que tu pronunciación sea buena!

Prueba estos consejos la próxima vez que puedas y ve cuál funciona mejor para ti. Acuérdate que ninguno tiene un resultado inmediato, pero te van a ir ayudando, con la práctica, a alcanzar tus metas.